El erizo de mar pertenece a la familia de los equinodermos (Echinidae). Es una especie que se encuentra normalmente en la costa adherida a las rocas del litoral, pero también se puede localizar a profundidades de hasta 80 metros. Los erizos de mar pueden adaptar su estrategia vital a diferentes condiciones ambientales, y ocupar así una gran variedad de hábitats. En zonas con un fuerte hidrodinamismo, como ocurre a menudo en el intermareal, los erizos perforan el sustrato con su aparato masticador, produciendo unas cavidades donde se protegen del oleaje y los depredadores. Esta actividad, junto con la gran capacidad adhesiva de sus pies ambulacrales y con su comportamiento gregario, les permite colonizar los hábitats costeros más batidos.
El erizo de mar es un alimento hipocalórico, prácticamente libre de grasas y que destaca por su alto contenido en proteínas, proporcionando la mayoría de aminoácidos esenciales. Aporta también un gran número de minerales como son el yodo, que ayuda a prevenir el hipotiroidismo, el potasio, que favorece el buen funcionamiento del sistema nervioso y ayuda a rebajar la tensión arterial, o el hierro, que previene la aparición de anemias. Su contenido en vitaminas aporta antioxidantes y favorece la circulación sanguínea. Por todo esto, el erizo de mar se ha convertido en un alimento muy cotizado hoy en día.
La parte comestible del erizo de mar son sus gónadas, que se encuentran en el interior de su caparazón adheridas a sus paredes. La pigmentación de las gónadas puede variar dependiendo de si es hembra, color rojo-anaranjado, o macho, color amarillo-blanquecino. Estas gónadas son un auténtico manjar gastronómico y han llegado a conquistar la alta cocina, convirtiéndose así en un producto gourmet.
El erizo de mar es de una versatilidad sorprendente, ya que se puede comer fresco, cocido, gratinado, en revueltos, en salsas, en arroces, croquetas, pastas, etc. Se dice que el sabor del erizo de mar es algo difícil de expresar con palabras, que es como poder degustar en un pequeño trozo de hueva todo el intenso sabor del mar e incluso transportarnos a él.
La época de explotación de esta especie es en los meses de invierno, de octubre a abril, antes de la puesta.
En Pescados Pedreira somos especialistas en este producto, comercializando en temporada el erizo de mar fresco y elaborando la hueva de erizo fresca. Además, para disponer de este producto el resto del año, también elaboramos la hueva de erizo congelada y nuestro caviar de erizos Leticia.
Detrás de nuestra marca Leticia hay mucho más que huevas de erizo, está todo el esfuerzo y esmero que ponemos a la hora de elaborar nuestro producto con la mayor calidad y poder así satisfacer a nuestros clientes.
